Skip links

Beber agua podría provocar cáncer de próstata

Un estudio liderado por el Instituto de Salud Global de Barcelona sugiere que el nitrato presente en el agua potable e industrial podría ser un factor de riesgo de cáncer de próstata, especialmente en hombres jóvenes y en tumores agresivos.

La exposición prolongada a este tóxico, presente en los fertilizantes usados en la agricultura y en los excrementos de la ganadería intensiva, podría multiplicar por tres la probabilidad de padecer cáncer de próstata.

La investigación destaca el papel fundamental de la dieta en contrarrestar los efectos negativos. El consumo de fibra, frutas, verduras o vitamina C podría reducir el impacto del nitrato presente en el agua potable. Por otro lado, la asociación entre nitrato ingerido y cáncer de próstata sólo se observó en aquellos hombres que ingerían menos fibra, fruta y verduras, o vitamina C.

Los antioxidantes, las vitaminas y los polifenoles de las frutas y verduras podrían actuar como inhibidores de la formación de nitrosaminas en el estómago, que son los compuestos con potencial carcinógeno.

El objetivo del estudio era evaluar si existía una relación entre la ingesta de nitrato y trihalometanos, también denominados THM,  a través del agua de consumo y el cáncer de próstata. Ambos compuestos son dos de los contaminantes más habituales del agua de consumo. A diferencia del nitrato, cuya única ruta de entrada es la ingestión, los trihalometanos también se pueden inhalar y absorber a través de la piel al ducharnos, bañarnos en piscinas o fregar los platos.

La exposición prolongada al nitrato se asocia con un mayor riesgo de cáncer de próstata, sobre todo en hombres jóvenes y en tumores agresivos. El nitrato presente en el agua potable e industrial procede de los fertilizantes y excrementos de la agricultura y ganadería intensivas, que son arrastrados por la lluvia hasta los acuíferos y ríos. Cuanto mayor es la cantidad de nitrato ingerido, mayor es la asociación con el cáncer de próstata.

Aquellos participantes con ingestas más altas de nitrato a través del agua multiplican por 1,6 la probabilidad de padecer un cáncer de próstata de bajo grado o medio, y por casi 3 la probabilidad de desarrollar un tumor de próstata agresivo, comparados con aquellos participantes que presentan ingestas de nitrato más bajas.

Para evaluar la posible asociación entre el cáncer de próstata y la exposición a largo plazo al nitrato y trihalometanos en el agua de consumo, se realizó un estudio de 697 casos de cáncer de próstata en hospitales españoles.

Los investigadores también examinaron la posible influencia de otros factores de riesgo para el cáncer de próstata, como la edad, el índice de masa corporal, el tabaquismo, el consumo de alcohol, la actividad física, la educación, la diabetes y la ingesta de calcio y grasas. También tuvieron en cuenta si los participantes habían utilizado suplementos dietéticos, ya que algunos contienen nitrato.

El estudio proporciona evidencia adicional de que el nitrato en el agua potable podría ser un factor de riesgo para el cáncer de próstata, pero es importante destacar que se trata de un estudio observacional y no puede establecer causalidad. Además, los resultados deben interpretarse con precaución, ya que los participantes no informaron sobre la exposición real al nitrato y los THM, y solo se basaron en los datos proporcionados por las autoridades locales de suministro de agua.

A pesar de estas limitaciones, los autores concluyen que es importante reducir la exposición al nitrato en el agua de consumo y promover una dieta saludable rica en fibra, frutas y verduras para reducir el riesgo de cáncer de próstata.

En resumen, se puede concluir que el estudio ha revelado que una exposición prolongada al nitrato en el agua que bebemos del grifo o procedente de agua en botellas, podría ser un factor de riesgo de cáncer de próstata, especialmente en los hombres más jóvenes.